Casa des Poble de Esporles

Concierto a cargo del concertista Miguel Caballero el día próximo día 2 de Julio en la Casa del pueblo de Esporlas.

Programa

Frédéric Chopin
Polonesa Op.26 nº1 en do sostenido menor
Nocturno Op.72 nº1 en mi menor

Franz Liszt
Años de Peregrinage, Italia: Soneto 104 de Petrarca en Mi mayor "Pace non trovo"

Franz Schubert
Impromptu Op.90/D.899 nº2 en Mi bemol mayor
Impromptu Op.90/D.899 nº4 en La bemol mayor

Frédéric Chopin
Fantasía-Impromptu Op.66 en do sostenido menor
Nocturno Op.27 nº1 en do sostenido menor
Nocturno Op.27 nº2 en Re bemol mayor
Scherzo Op.39  en do sostenido menor

La polonesa Op.26 nº1 es posiblemente una de las más refinadas dentro del catálogo chopiniano. El bellísimo nocturno en mi menor es una obra de juventud que parece estar relacionada con el trágico fallecimiento de la hermana menor de Chopin cuando éste contaba con 17 años. La triste belleza de esta obra anuncia prematuramente las cualidades del genial compositor a través de la elaborada escritura de la mano izquierda sobre la que realmente se sustenta la solidez de toda la obra: Sentimos el dolor del compositor, la nostalgia de vivencias que nunca ya regresarán y la serena aceptación de una pérdida irreparable expresadas a través de una de las más bellas y profundas melodías salidas de su piano.

El soneto 104 de Petrarca nos muestra a Liszt en estado de gracia: La fascinante personalidad del salvaje compositor húngaro parece adaptarse como un guante al texto del poeta, donde conviven cielo e infierno.

Los dos impromptus de Schubert pertenecen a las últimas obras compuestas por el autor, auténticos lieder donde el piano se acompaña a si mismo cantándonos poesías que van más allá de las palabras.

Regresamos en la recta final del recital al compositor polaco: La Fantasía-Impromptu, es una obra fascinante, agitada, apasionada, lírica y profundamente cautivadora. Los dos nocturnos del Op.27 son dos obras maestras dentro del género. Son las dos caras de una misma moneda: el primero es la oscuridad, una visión fantasmagórica del otro mundo. Es un retrato de la patria del compositor, subyugada y derrotada por la guerra: Escuchamos los lamentos y los cañones, el deseo de levantarse y la derrota y, al igual que en el nocturno en mi menor del comienzo, la transformación del dolor y del sufrimiento a través de una serena aceptación que nos conducirá a la luz del segundo nocturno donde el poeta canta en primera persona desde el piano y a través del piano.

Finalmente, el Scherzo en do sostenido menor, una de las obras cumbres del compositor. De nuevo, las luces y las sombras. El tema principal es oscuro, descarnado, casi demoníaco, como una suerte de diabólica danza ritual alrededor del fuego. El tema central, radicalmente contrastante, luminoso, transforma al instrumento en una coral rodeada de cascadas de celestiales notas cristalinas. La obra fue gestada durante la estancia de Frédéric Chopin en el monasterio de Valldemossa y completada a su regreso a Francia.